Estos pendientes artesanales combinan la elegancia del acero dorado con la frescura del océano. Sobre un aro de 30 mm, se disponen mostacillas en distintos tonos de azul —desde el azul claro hasta un azul más profundo— que evocan la calma y el movimiento del mar. Como detalle central y lleno de carácter, cuelga un pequeño cangrejo de cristal rojo, que aporta un toque vibrante y divertido, como una joya escondida entre las olas.
Ligeros, llamativos y cuidadosamente elaborados a mano, los Pendientes Mar de Coral están pensados para quienes disfrutan de los accesorios con alma, que cuentan una historia y llenan de color los días de sol. Perfectos para dar un aire fresco, alegre y veraniego a cualquier conjunto.